Llevamos
dos semanas los colombianos nadando en aguas turbulentas, y al parecer falta
trecho todavía, el país necesita que se sepa toda la verdad, que caigan los que
tengan que caer pero queremos ver resultados.
Afortunadamente
el tema Odebrecht es tan dramático en todo Latinoamérica que ha sido difícil
taparlo acá, seguramente no es el único ni el mas grande hecho de corrupción en
Colombia, pero dado que Estados Unidos está involucrado ha tomado un valor
diferente.
Cada
día sale mas información acerca de lo bajo que se operó en la campaña
presidencial del 2014, después de la información sobre la infiltración de la
campaña de Zuluaga, aparece la supuesta
entrega en efectivo de recursos en un Hotel, recursos que obviamente no
están en las cuentas de la campaña, y que recordando la campaña del 94 de
Samper seguramente se utilizaron para la compra de votos tan grande que se necesitó
para la segunda vuelta del 2014
De
hecho, es un secreto a gritos que las campañas políticas gastan mucho mas
recursos para salir elegidos que los que anotan en sus libros, la desproporción
es abismal, muy complicado de controlar también ya que la mayoría de estos
recursos se mueven en efectivo manejados por los mochileros ya reconocidos en
las elecciones en la costa. La financiación total de las campañas es una buena
formula pero no evita el menudeo.
No
es fácil saber como poder limpiar la política de la corrupción, de la
financiación de contratistas del Estado, de sobornos, pero pienso que un primer
paso debería ser acabar con el voto preferente, volver a lo que antes llamaban
el bolígrafo donde los jefes de los partidos podían a su antojo hacer el orden
de la listas de Congreso, pero tiene las siguientes ventajas:
1.
Funcionan mejor las bancadas, los congresistas
tienen menos autonomía y dependen mas del partido.
2.
La financiación de recursos se hace a nombre del
partido y no individualmente, esto hace que no entren recursos con doble
propósito.
3.
El voto de opinión, que es mas objetivo, se
convierte en un trofeo para las listas, de esta manera buscaran poner en las
listas a personajes preparados y con buena opinión mas que gamonales de la
política tradicional.
4.
Fortalecer los partidos políticos es fundamental
para nuestra democracia, las listas preferentes debilitan los partidos.
Los
riesgos que se avecinan en esta nueva campaña electoral no son pocos, primero
tendremos un proceso de paz andando con el ELN, un posconflicto con las Farc, y sumado los casos
de corrupción se puede estar generando la tormenta perfecta, donde un populista
ajeno a la política termine ganando, y sabemos que esto no ha funcionado bien
en ningún país de la región, un buen espejo es Venezuela.
Las
ideologías deben llegar coalicionadas a las elecciones, a riesgo de no pasar a
la segunda vuelta, y tener como muchas veces nos ha pasado que la solución a
sido votar por el menos peor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario